Mon Guerlain Eau de Parfum es un perfume ambarino que sublima unas materias primas excepcionales: la lavanda francesa, el Jazmín Sambac, la madera de sándalo y la vainilla Tahitensis. Este perfume recoge la quintaesencia de una historia llena de vivencias, saber hacer y generosidad destilada con idéntica pasión desde 1828.
La lavanda francesa, una variedad excepcional cultivada en Provenza, contrasta con la sensual y envolvente vainilla Tahitensis, aportándole su audacia y su frescor. El Jazmín Sambac, recogido al alba, aporta toda su delicadeza a la composición. El sándalo es la madera que da fuerza y preserva el misterio del eterno femenino.
La esencia de lavanda cosechada en la Provenza francesa, con su excepcional calidad olfativa, aporta a la fragancia una audaz frescura aromática floral.
La vainilla Tahitensis presenta matices florales y almendrados que dotan al perfume de una faceta envolvente y golosa.
El sándalo, cultivado principalmente en Australia, donde se cosecha y destila su madera, aporta una faceta amaderada y cremosa al perfume.
El jazmín Sambac es el nexo entre la deliciosa vainilla y la lavanda y aporta a esta composición toda su finura.
El frasco "Quadrilobé", creado en 1908, se impuso como un frasco icónico de la Maison. Se trata de un recipiente depurado y gráfico inspirado en los frascos de los alquimistas y que debe su nombre al tapón con forma de cuatro lóbulos. Un siglo más tarde, realzado mediante un lujoso cuerpo de cristal y un adorno de oro, este frasco ofrece un contraste entre la fuerza de las líneas rectas y la sensualidad de las curvas que expresa como nunca la feminidad contemporánea.
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